martes, 30 de abril de 2013

PLIEGO DEL INDIANO.

Selección de dípticos 
Pliegos del indiano



Para los escribidores del cuchillo pastelero




Hablando de futbol, no sé  en qué división se creen  que juegan algunos patéticos personajes de la parafernalia literaria de Cáceres.
Pero lo que sí sé, es que tienen la boca muy grande y la envidia “esa señora del ceño fruncido y lengua viperina” muy alerta.
Señor mío:
Siga usted tirando piedras familiares y controle su sonora estupidez  que torres más altas han caído y cumbres más  borrascosas he escalado.

Amén

sábado, 27 de abril de 2013

TIC-TAC






Estas son las horas presentes,
las horas del polvo
que desgrana su parte de barro.
Estas son las horas de la quimera,
de los equinoccios,
de los sempiternos segunderos.
Las horas de las rocas golpeadas
por el afán destructor de las tempestades,
asumiendo la derrota
bajo los relámpagos de la primavera.
Esta son otras horas, nuevas, limpias,
cubiertas de azul por las ventanas del aire.
Son las horas en las que te siento,
llenando de incógnitas tu perfil perdido,
dibujado en los escaparates de antaño.
Vuelvo a imaginarte en estas horas de los árboles,
de los almendros derramando su dulce néctar
entre las sílabas que pare el silencio.
Ya te recuerdo, como mirabas los restos del naufragio,
una brújula sumergida en las arenas,
un baúl golpeándose contra los acantilados
un “te quiero” falto de vocabulario,
mecido por el tic, tac de las estrofas.
Estas son las horas acaecidas
donde habita nuestra realidad
cubierta de pasados.



miércoles, 24 de abril de 2013

TE HAS IDO


Te has ido: 
Desde todos los días,
desde las mañanas que crecen si enumerar cada crepúsculo,
desde el pasado mañana que se refugió en un verso,
desde aquel día donde no hubo ya más días
para cobijar cada corazón abatido.

Te has ido desde todos los ángulos posibles de la existencia.
Te has ido igual que parten los astros,
igual que parten los segunderos afines a la derrota,
igual que parten todas las cosas que nunca te dije.
Tú memoria se perdió detrás de cada avenida,
entre los sueños que abanicaban la tarde.
Te has ido desde el tiempo
donde se evaporan unidas,
las sonrisas de antaño y las evocaciones de hoy.
Te has ido:
No recuerdan mis vocablos el lejano “te quiero”
que ya no pronuncio.

lunes, 22 de abril de 2013