En las entrañas de la tierra, nace el fuego,
moldea la semilla y el barro,
funde la roca con forma de lágrima,
avasalla la rosa
y llena los vientos de lava y humo.
Forja la montaña, en sus perfiles dorados; él, terrible,
se lamenta en el oxígeno,
hornea y devora con su lengua salvaje
las sombras de la noche,
crepita en la arboleda
y danza en los profundos lares de la tierra.
-Hefestos rompe en el yunque su martillo de flama.-
Vaya maestro, desconocía esta faceta tuya de canto a lo mitológico. Sea como sea, inconmensurable el tributo a Hefestos.
ResponderEliminarAbrazos poeta