lunes, 13 de febrero de 2012

Carta abierta de un señorito bien





Los del  pp no tenemos miedo a las revueltas, nos mofamos  de ellas. (En Valencia se han batido records tanto de corrupción, como de caradurismo durante años y ahora no hay un puñetero euro en las arcas autonómicas). No pasa nada, el pueblo paga, pues nosotros, hagamos lo que hagamos, aquí estamos, subidos en tronos de cuentos, con trajes impecables y ríase la gente. ¡El pueblo paga! Y siguen y siguen eligiéndonos como un Tsunami indecente.
¿Entonces?  
Pues eso, que adelante con las reformas laborales, que pague siempre el mismo.
Que adelante con las castas sociales, sí, aquellas de antaño, las llenas de privilegios, las más grandes castas de siglos postreros.
Que adelante con los Urdagarinazos, que aquí a la cárcel va el choricero, no el ladrón de guante blanco. Y si me apuras nos llevamos por delante a los jueces que osen  desafiarnos.
Que adelante con los desahucios por no pagar hipotecas, que esa familia a la calle, que necesito el pisito, pues mi amante no tiene donde medirse el talle.
Que adelante con los indignados, a los leones con ellos. ¿Indignados, de qué?, pero si tienen de todo, viviendas, ¡ah, eso no!, bueno, pues, trabajo, ¡ah, eso tampoco!, pues paro, que bien están en sus casas sin trabajar. ¿Qué tampoco? –De verdad, sus señorías- es que lo quieren todo esta plebe de malhumorados.
Adelante pues con las reformas laborales, que esto lo arreglamos de una vez, sí, de un plumazo.
Ya os vale, santitos inocentes, ya os vale.

No hay comentarios:

Publicar un comentario