viernes, 31 de mayo de 2013

PASAN LOS DÍAS




¿Lo ves? Ya pasan los días;
quizás, jamás hayan pasado 
con tanta aspereza
como en estos tiempos, tan abstractos, 
tan … sin ti: ¡amor mío!
Tan sin ti.

Los días pasan
y, de tal modo, acarician los relojes…
el minutero se transforma en herrumbre
y las horas, en las cuales te pienso,
se vacían, otra vez, de palabras.
Pasan los días, y no te distingo
en la marchita frente de los vocabularios.
Los días son dedos que advierten
la pronta desnudez de la memoria.
Son gestos que transforman
las tenues luces del aurora.
Son tiempos que extraigo
de la monótona palpitación de tus recuerdos.
Son lágrimas que caen, impertérritas, de las estaciones,
rosas, al vuelo, como palomas mancilladas.
¿Lo ves? Ya pasan los días

y aquellos, de los que tú yo hablamos, 
yacen, serenos, en los retratos del suspiro.

martes, 28 de mayo de 2013

Nuestro lugar perdido en la tierra



Un día tras otro 
detrás de todo lo posible e imposible,
lo acaso, lo quizás, lo imperfecto.

Un paso largo y el instante
devorando las huellas que dejamos,
asumiendo el esfuerzo de lo acontecido.
La distancia hermanándose con lo eterno,
el postrer pulso que da, a la memoria,
las noches de antaño,
evocando los silentes labios del día.

Un día tras otro,
será otro día cualquiera,
cuando el tiempo nos dé, como a otros antes,
su finiquito de aire,
retornaremos al polvo,
suspendidos en el barro o su equivalencia,
ajenos de todo lo que acontezca en nueva cuna.

Y llegará el final,
y será el final
y besará el final, nuestro punto de encuentro,
nuestro lugar perdido en la tierra.

jueves, 23 de mayo de 2013

Tu tarde junto la mía


Si atardecer es:
Vivir, por ti, cada instante.
Advertir como tu mirada me busca
en los lugares que ocupo,
o sentir como todo lo cubres con una sonrisa.
Si atardecer, digo, es sentirte en cada instante:
Hágase, en mí,  tu voluntad enamorada.
Hágase, en mí, la lluvia, los pasos del júbilo,
o el candor de saberte cierta.
Hágase, entonces, tu tarde junto a la mía.

Poema: José Cercas
Foto: Fran de la Cruz
Modelo: Ester Gómez Valades

lunes, 20 de mayo de 2013

LA PALABRA






“Me queda la palabra”
Blas de otero


 LA PALABRA

La palabra nace en el gesto,
fluye del manantial sonoro de los fonemas
y se justifica en la ortografía.
La palabra habla, a veces llora y hiere,
pero siempre, se la oye batir
en los labios efímeros de la evolución.
La palabra es una casa con su fachada blanca,
son mis ojos buscando en el horizonte
el deseado perfil de la amada.
La palabra es la memoria que duerme
en la laringe de la historia,
es la lenta unión
de las silabas cuando atracan en las bocas.
La palabra proclama su hegemonía,
se declama y se la lee palpitando
en los libros del tiempo.
La palabra es la libertad,
es la expresión sosegada de la ternura,
es la furia y la compresión.
Dad, pues, a la palabra, la vida
y así justificaréis que habéis vivido.

viernes, 17 de mayo de 2013

CANTO A LOS IMBÉCILES QUE NOS GOBIERNAN



En el principio los imbéciles fueron el corpúsculo del átomo,
después un río de ellos, construyó la historia,
luego un manantial de imbéciles quiso gobernarnos...
...y lo consiguieron,
mientras, los poetas inventaban la primavera,
mientras, los poetas buscaban en el barro, la razón de nuestra existencia.

Desde entonces, un río de imbéciles nos gobierna,
ellos, los imbéciles, nos dieron alas para inventar la palabra tirano,
la materia fuera del átomo,
la espada y el fusil que amortaja al inocente.
También, en aquellos tiempos, fueron inventados,
el tanque y los bombardeos al son del grito.

Desde entonces, nos gobiernan los imbéciles,
cuando el poeta buscaba la lira detrás de las nubes,
y pintaba de azul los hocicos negros de los gobernantes.

Por todo ello, gobiernan los imbéciles,
desde las cadenas y el hambre,
desde aullidos y el dolor de la víctima,
desde que, el no imbécil, contempla el paisaje
y pinta con primaveras, las oscuras puertas del averno.

Desde entonces, nos gobiernan los imbéciles.
Los imbéciles son los seres del resuello,
rumian en el aire y lamen el lingote de oro.
Los imbéciles inventaron el hambre y los territorios,
suyas son las definiciones de la materia,
las televisiones, los móviles y las resacas.
Suyas son las casas vacías,
el pan que ya no alimenta la risa
y el sabor amargo de las hipotecas.

Desde entonces nos gobiernan los imbéciles.
¡¡¡ Los imbéciles, los imbéciles!!!.
Los imbéciles nos gobiernan desde entonces.

miércoles, 15 de mayo de 2013

DUERMES




Duerme la tarde:
El crepúsculo emprende su viaje en los cristales de los escaparates, y como si de una cinta de luz rojiza se tratase, va delineando sus tonos estivales en las aceras. Junto al mar, las casas perfilan se horizontes marítimos.

Duerme la voz antigua del agua:
Se va, deshaciéndose en espumas, acaricia las arenas de las playas, y como si del ciclo natural de la vida se tratase, se pierde en la lenta eternidad de las cosas.

Duerme el verano:
Los besos que nunca te di, van en busca del recuerdo que tengo de tu boca y como si de un baile de labios se tratase, duermen, para siempre, en la inexorable brisa del recuerdo.
Duerme en el verano tu voz de medianoche:
Te perfilas bajo las aguas y prosigues tu camino de sueños.
Y como si de un canto al amor se tratase, duerme, en tu sonrisa, lo que tanto hemos sentido.
Duermes, duermes, duermes…

José Cercas

martes, 7 de mayo de 2013

LA CIUDAD


LA CALLE


Sean estas, las palabras que te entrego:
las calles en las que reconozco
el suspiro que se posó en tus labios.
La llave encantada de mi casa en las nubes.
Sea esta mi voluntad de caminarte.

LA CIUDAD

Sean estas, las torres del viento donde se posaba la tierra:
la ciudad que parpadea bajo tus sombras,
el niño que fui, la niña que te cobija
que juegan a quererse en las esquinas.

LA PAREJA

Sean, pues, tus manos junto a las mías:
tu vocabulario junto al mío,
sea la justa pronunciación del verbo “amar” junto a nosotros.


LA NOCHE

Sean estas, todas las noches en las que libe tu nombre
como a un jazmín, como a las noches azules de la primavera.

CONCLUSIÓN

Sea esta, si así lo pretendes, mi manera de quererte


José Cercas
Foto de Fran de la Cruz

sábado, 4 de mayo de 2013

Algunas de mis presentaciones por España

Señor mirindungui, 
yo hago presentaciones porque la gente va a verme. 
A usted no va a verle ni los del tiro de piedra.
De modo que métase en sus cosas y le irá mejor.

Ateneo de Mairena del Alfaraje

Palcio de la Isla

Biblioteca "Delgado Valhondo" de Mérida

Biblioteca Municipal de Requena

Salón de actos de Bicorp. (Valencia)


Casa de las provincias (Sevilla)