jueves, 14 de octubre de 2010

Desde mi aurora diviso la vida



Mira que en los labios no hay relojes,
ya no quedo a la hora en punto
en tus ojos de artículos enamorados;
ni subo a los campanarios para ver la primavera,
ni tañen las campanas por los días venideros.
Mira que el tiempo no para,
ya no se dibuja en los vértices de tus labios
el hondo verbo que te anuncia mi presencia;
no intuyo tu piel enamorada,
y tu doliente tacto me aparece ya relegado
a los versos rotos de las estaciones.
Mira que no veo tu figura retenida
poblar de nubes mis besos serenos
ni a tu furia de agua dejar
un arco en el iris de mis ojos;
no trinan los pájaros en las ramas del aire,
ni en tu brazos se agitan victoriosas las azucenas.
Mira que ya presiento tu pasado;
desde tu crepúsculo diviso el alba,
desde mi aurora la vida.

3 comentarios:

  1. El tiempo no para e innegablemente arrastra los sueños perdiendolos en los surcos cada vez más profundos e infinitos de la vida...

    Toda Mi admiración,

    Karla

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  2. Excelentisimo mi querido amigo, siempre es grato venir a tu espacio y encontrarme con tu versar, deseo que nunca deje de fluir esa inspiración y que tus poemas sean inagotables.
    besos bandido.
    Vickie

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  3. ESTIMADO PEPE, ES UN PLACER PASAR ESTE DIA POR TU BLOG Y LLENARNOS DE TU PRESENCIA, BUEN GUSTO Y ROMANTICISMO.
    GRACIAS POR ESTAR EN NUESTRO CAFECITO, TE QUEREMOS MUCHO.
    VICKY, LUPITA Y KARLA
    CAFE LITERARIO 2010

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