Alguna vez la primavera tendrá tus ojos,
ansiosas abejas libaran las lágrimas
y el néctar caído de tus labios.
Cuando tus besos abran su perfecta simetría,
el deseo, canción pura que la noche esconde,
rubricará tu destino de luna llena
y tú te reirás y de tu risa germinará la vida.
Algún día la primavera tendrá tu cuerpo,
te besarán los lirios en las quebradas,
llenaran de miel tu cintura
las montañas cubiertas de luz,
la lluvia te vestirá de bruma y tules
y besarás la tierra que dormita bajo tu pecho.
Alguna vez la primavera se hará eco de tu presencia,
de ti nacerá la vida en forma de claveles,
te vestirás de albas y de trinos
cuando el brote tenga tus ojos
y tu cuerpo la savia natal de tu figura;
porque alguna vez tú serás la primavera.
¡Ay!.... Quien estuviera en primavera.
ResponderEliminarCon un poema asi,¿ como no sentir la primavera?
ResponderEliminarBello poema,la primavera solo engalanará lo que Ceres sentía, no lo dude poeta.
La primavera aflora lo primario, instintivo , y las demas estaciones tienen otros encantos ,sintiendo cada una de ellas.... sucesiones de vida.
ResponderEliminarHermoso poema.